Existe una fuerza sencilla en los espacios verdes que transforma cualquier fotografía en un recuerdo inolvidable. Hoy, Adriana nos conduce por un reportaje realizado en el Parque de las Gaveras, en La Rinconada, un lugar de praderas, árboles y senderos donde la luz juega entre las hojas.
Entre el murmullo del viento y el sosiego de los rincones sombreados, Adriana aparece como una joven llena de vida, una presencia fresca que se integra con el paisaje. Su figura dialoga con la corteza de los árboles y el césped, y su energía transmite una alegría natural y cercana. Prepárate para un recorrido visual que celebra la inocencia de la edad, la calma del entorno y la frescura propia de quien está estrenando en la adolescencia




















































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